“Y dicen los que se niegan a creer: La Hora no va a llegarnos. Di: Sí, por mi Señor que os llegará. Él es el Conocedor del No-Visto. No se Le escapa el peso de una brizna ni en los cielos ni en la tierra, ni hay nada que sea menor o mayor que ello que no esté en un Libro explícito”. (34: 3)
“Y si después del daño que le tocó le hacemos probar una misericordia de Nuestra parte, dice: Esto es cosa mía, no creo que la Hora vaya a llegar y aún en el caso de que volviera a mi Señor, sin duda que tendría junto a Él lo más hermoso. Les haremos saber a los que se negaron a creer lo que hicieron y les haremos gustar parte de un duro castigo”. (41:50)
La evidencia
Estamos plenamente convencidos de que no ha habido ningún otro libro en toda la historia de la humanidad que haya dado una explicación tan detallada del comienzo y el fin del mundo. Profundiza en todos los libros de historia que preceden a los datos científicos y verás que no hay ninguno como el Corán. Se dijo que el Corán proporcionaría los signos y la evidencia; ¡Aquí están! ¿serán suficientes para alguien que es imparcial?
El hombre tiene como habito, en la época en la que viva, considerar que todo a su alrededor es constante y estático. En el momento del Profeta, hablar del fin del mundo, y especialmente del universo, estaba más allá de lo que podían imaginar. La gente ignoraba el hecho de que el mundo era un objeto volando en el espacio, lo consideraban como un lugar seguro. No podrían haber creído que llegaría el día en que todo pudiera desaparecer.
Un proceso irreversible
A medida que se tuvo más conocimientos, gracias a los descubrimientos científicos, se hizo evidente que el fin del universo y de nuestro mundo era inevitable. Nadie de mente sensata hoy afirmaría que el mundo existirá para siempre. Incluso si no ocurre ningún otro fenómeno celestial, es cierto que una vez que se agote la energía del sol, el fin del mundo será inevitable. Sin embargo, el camino y la hora exacta no pueden predecirse.
Para darte un ejemplo, las leyes de la termodinámica indican que llegará el fin. Los estudios de Rudolf Clausius han llevado al descubrimiento de la ley de la entropía de que hay un proceso irreversible en el universo. La entropía total aumenta continuamente en el universo. El calor del sol fluye hacia el frío del universo y este proceso es irreversible …
Nada en la creación es eterno
¿Este proceso continuará para siempre? La respuesta es «No». Cuando el calor alcanza una temperatura constante, se produce un estado estático llamado «equilibrio termodinámico». El flujo de calor del sol y de la multitud de estrellas puede durar miles de millones de años, pero no es inagotable. Al final de un período de tiempo, las leyes de la termodinámica harán que las actividades que se desarrollan en el universo se detengan.
Y debemos recordar que una entidad que no puede durar eternamente tampoco podría haber existido desde la eternidad. Bajo estas circunstancias, podemos hacer las siguientes deducciones: que el universo tuvo un comienzo, y que llegará a su fin algún día.
El argumento materialista
Todas las religiones que han expuesto la creencia en un Dios a lo largo de la historia han sido defensores de estos dos argumentos. El Corán también se advierte sobre el comienzo y el fin del universo. Por otro lado, los materialistas afirman que la materia ha existido desde la eternidad y continuará existiendo por los siglos de los siglos. En otras palabras, niegan el comienzo que condujo a la idea de la creación y el fin del mundo, la condición sine qua non de la religión.
Cuando, como resultado de los descubrimientos en astrofísica, se hizo evidente que el universo sí tenía, de hecho, un principio y un final, algunos ateos intentaron ajustar sus teorías a los nuevos descubrimientos. Sin embargo, es evidente que antes de que este problema se estableciera científicamente, los ateos estaban en contra de esta idea.
El final del universo
Las leyes de la termodinámica confirman las afirmaciones de las religiones monoteístas. Esta es entonces la evidencia científica que respalda las enseñanzas de las tres principales religiones monoteístas con respecto al fin del mundo. Si el universo hubiera existido desde la eternidad, de acuerdo con las leyes de la termodinámica, todas las acciones en todo el universo habrían llegado a un punto muerto (de acuerdo con el equilibrio termodinámico). El hecho de que todavía hay acción en el universo muestra que el universo no tenía existencia eterna, pero que tenía un comienzo.
El final del universo, incluso si no hay otra razón, es inevitable debido a las leyes de la termodinámica. En nuestra era, no es discutible si habrá un final para el universo o no, sino cómo se producirá este fin. En el momento en que se reveló el Corán, era impensable para muchas personas que el fin del universo y de nuestra tierra llegaría a su fin. Debemos tener en cuenta que hasta los no creyentes en aquella época tenían muchas objeciones a esta idea.
Fuente: http://www.quranmiracles.com/2011/03/those-who-disbelieve-in-the-end-of-the-universe/ ; traducido y editado por la redacción de TS