Por: Abu Aliyah
Shaykh Abdal Hakim Murad explica: «En el milieu occidental, los conversos al Islam afirman que se sienten atraídos por lo que consideran enseñanzas claras y racionalmente accesibles, no escondidas por elaborados misterios. No sólo son los seguidores del Islam quienes mantienen esta opinión. Los académicos no musulmanes frecuentemente llaman la atención sobre el papel central de la razón en la teología islámica”. (Reason as Balance (CMS Paper 3), 2, at http://www.cambridgemuslimcollege.org)
Shyakh Abdalhakim cita el libro de Leamán Corán: Una enciclopedia, diciendo: «El Corán realmente muestra un compromiso inusual con la argumentación y la lógica en su autoexplicación».
En otro lugar en el mismo libro, Leaman dice que mientras que el judaísmo está fuertemente vinculado con la etnicidad, y el cristianismo con un salto de fe, el Islam ha crecido exitosamente subrayando su racionalidad y evidencia.
Dicho esto, consideremos ahora algunos ejemplos de cómo el Corán emplea un discurso racionalista universal -especialmente respecto a su teología y su invitación al monoteísmo.
El Argumento lógico del Corán frente los ateístas
Uno de los argumentos racionales se enfrenta al ateísmo. El Corán interroga la creencia de los ateos preguntando:
¿O es que acaso han sido creados espontáneamente o se han creado a sí mismos? ¿O han creado los cielos y la tierra? Por el contrario; no tienen certeza. (El Monte, 52: 35-6)
Es decir, o bien nos creamos a nosotros mismos, lo que es inconcebible, o fuimos creados de la nada, otra imposibilidad. La lógica nos deja una tercera posibilidad: que fuimos creados por un creador. Este argumento simple no sólo postula un Creador, sino que dada la notable diversidad y complejidad de la vida y el universo, este creador debe poseer Poder, Voluntad, Conocimiento, Sabiduría e Intención. Es decir, la creación debe tener un Diseñador sabio, inteligente y con propósito.
Uno detecta la elocuencia pura y potencia del árabe original (indudablemente, perdida en la traducción) en la historia de conversión de Jubayr b. Mut’im. Este dijo que una vez escuchó al Profeta, que la paz sea con él, recitar el capítulo que contiene este versículo durante la oración de la puesta del sol. Cuando alcanzó el verso mencionado, Jubayr dijo: kada qalbi un yatir – ‘Sentí como si mi corazón saliera volando [de mi pecho]’. Luego fue a abrazar el Islam.
El argumento lógico del Corán frente al poder del ser humano
Otro argumento lógico que utiliza el Corán es:
¿No has visto a aquel (Nemrod n Kanan) que, porque Allah le había dado soberanía, desafió a lbrahim discutiéndole a su Señor? Dijo Ibrahim: Mi Señor da la vida y da la muerte. Dijo él: Yo doy la vida y doy la muerte. Dijo Ibrahim: Allah trae el sol desde el oriente, tráelo tú desde occidente. Y quedó confundido el que se negaba a creer. (La Vaca, 2: 258)
Inicialmente Nemrod presume en su respuesta a Abraham de que él también tiene poder sobre la vida y la muerte de sus súbditos. Por lo tanto, después de haber visto el modo en que Nemrod se está preparado para tergiversar el asunto, Abraham lleva el argumento a otro nivel desafiándole a alterar el movimiento del sol mientras recorre el cielo. Nemrod queda silenciado y estupefacto; sus pretensiones destrozada; se le hace comprender que la divinidad no puede ser reclamada simplemente por tener soberanía sobre un pueblo en algún rincón de la tierra de Dios.
El argumento lógico del Corán frente a la pretendida divinidad de Jesús
Al referirse a la afirmación cristiana de la divinidad de Jesús, el Corán dice:
El Ungido, hijo de Maryam, no es más que un mensajero antes del cual ya hubo otros mensajeros. Su madre era una mujer veraz y ambos comían alimentos. Mira cómo les hacemos claros los signos y mira cómo luego inventan. (5:75)
La vida humana normal que vivió Cristo ha perturbado a los que desean convertirlo en una deidad, a pesar de las evidencias de lo contrario en los Evangelios. La lógica del Corán es clara. La comida se come para satisfacer una necesidad física incuestionable. Quien necesita comer alimentos terrenales no puede, por lo tanto, ser una verdadera deidad que posea una perfección absoluta y por lo tanto ser digno de adoración. La santa María y su hijo Jesús, ambos comieron; así pues no pueden ser divinos.
De hecho, a partir de versículos parecidos es este, muchos teólogos han definido de forma racional una verdadera deidad, o ilah, como: «Uno que es independiente de todas las necesidades más allá de sí mismo, mientras que todo lo demás es totalmente necesario de él.
El argumento lógico del Corán frente al politeísmo
El Corán emplea la «lógica del señorío» para aclarar a los árabes paganos (mushriks) la idiotez de la idolatría -de adorar a dioses junto a un Dios único. Dice:
Y si les preguntas quién creó los cielos y la tierra y subordinó al sol y a la luna, sin duda que dirán: Allah. ¿Cómo entonces inventan? (La araña, 29:61)
Otro versículo dice:
Di: ¿Quién os provee desde el cielo y la tierra? ¿Quién tiene en Su poder el oído y la vista? ¿Quien hace salir lo vivo de lo muerto y lo muerto de lo vivo? ¿Quien rige el mandato? Dirán: Allah. Di entonces: ¿Es que no vais a temer? (Yunus, 10:31)
Así, después de haber afirmado el papel de Dios como único Señor, Creador y Sustentador, el Corán exige que los árabes paganos lleven este argumento a su conclusión lógica: que nada debe ser adorado más allá de Dios. Ibn Kathir escribió
«Los paganos que adoraban a otros junto con Él (Dios) afirmaban que Dios es único, creador de los cielos y la tierra, el sol y la luna, alternando noche y día; Y que Él solo es el Creador y Proveedor de Sus siervos, ofreciéndoles su sustento y sus vidas … A pesar de esto, ¿por qué adorar a otros o depender de otros? Pues así como el dominio y la soberanía son exclusivamente Suyos, entonces también solo Él merece ser adorado”.
El argumento lógico del Corán para la resurrección y la Otra vida
¿Es que no ve el hombre que lo hemos creado de una gota de esperma? Y sin embargo es un puro discutidor. Nos pone un ejemplo olvidando que él mismo ha sido creado y dice: ¿Quién dará vida a los huesos cuando ya estén carcomidos? Di: Les dará vida Quien los originó por primera vez, que es Quien conoce a cada criatura. (36: 77- 79)
El Corán quiere demostrar la plausibilidad de la resurrección a muchos de los idólatras que la rechazan simplemente recordándoles la «primera creación» del hombre. El hecho de que cada individuo haya sido creado una vez antes por la Voluntad Creadora de Dios, debe ser la prueba en sí misma de que la misma Voluntad Creativa es capaz de hacerlo una segunda vez:
¿Es que no ven cómo Allah crea una primera vez y luego lo hace de nuevo? Realmente eso es simple para Allah. (La araña, 29:19)
El Corán también alude a cómo el fenómeno de la resurrección está prefigurado en este mundo. Las «mini-resurrecciones» ocurren todo el tiempo en el mundo natural: las flores y el follaje mueren parcialmente en invierno, sólo para resucitar en primavera.
El Corán también da el símil de un desierto cuya tierra árida y muerta resurge a la vida, verde y exuberante, con cada gota de lluvia misericordiosa:
Él es Quien envía los vientos como anuncio previo a Su misericordia, y cuando forman una nube pesada, la conducimos a una tierra muerta y de ella hacemos caer agua con la que hacemos que broten toda clase de frutos. Del mismo modo haremos salir a los muertos. Tal vez podáis recapacitar. (Al Arag, 7:57)
Esto son solo algunas muestras de cómo el Corán usa un discurso racional para reivindicar sus verdades teológicas principales, sin tener que recurrir a un argumento circular (es decir, es verdad porque el Corán lo dice). Así, mientras que el Corán insiste en que sea la verdad revelada y la Palabra de Dios, y que debe ser aceptado como tal, permite una defensa de sí mismo y sus principales afirmaciones metafísicas basadas en argumentos racionales.
Fuente: https://thehumblei.com Traducido y editado por Truth Seeker Es