Por: Redacción
Una de las principales preguntas que se hacen los filósofos, y en general todo pensador, es ¿qué es el conocimiento? O ¿cómo se conoce algo? ¿Cómo podemos asegurar que aquello que decimos conocer es real?
Y ante esta pregunta surgen diferentes metodologías, o epistemologías del conocimiento, las cuales hacen uso de diferentes herramientas para sacar sus conclusiones.
La meta de esto es concluir que conocimiento es real e infalible y cuál no y cuáles son las verdades primeras, y las herramientas son muchas.
Dice Al Ghazali que la búsqueda de este conocimiento es lo que le llevó a dejar el puesto de mucho prestigio que tenía en Bagdad y emprender una búsqueda de este conocimiento.
Cuando Al Gazali se pregunta sobre qué es aquello de lo que sabe, de lo que tiene conocimiento, de lo que tiene absoluta certeza, empieza diciendo que solo puede confiar en las verdades primeras o necesarias y sus sentidos.
Al hacer un análisis de sus sentidos, Al Gazali se da cuenta de que la información que estos proveen no es infalible, es más, que los sentidos a menudo fallan en esta tarea puesto que interpretan cosas tal y como las perciben, y no como son.
Al pasar a analizar entonces si puede solo confiar en las verdades necesarias, por ejemplo, que 10 es más que 3, propone el ejemplo de un sueño el cual parece real pero al despertarnos nos damos cuenta de que no lo es. Hace esta analogía para asimilarlo a la muerte, puede que morir sea solo un despertar a una realidad en la cual la vida nos parecerá como un sueño. Como dijo Saidina Ali: “El hombre está dormido y cuando muere despierta”.
Y el que no haya prueba de esto en este mundo, no significa que no sea así. De igual manera que si no hubiese intelecto que se cerciorase de que lo que los sentidos perciben no es siempre real, no significa que estos trasmitan una información fidedigna.
Al llegar a este momento Al Gazali abre la puerta a otro tipo de conocimiento. El conocimiento el cual es directamente inspirado por el Creador.
Esta parte es muy interesante, puesto que abre la puerta a entender parte de la naturaleza la profecía.
Al Gazali propone que si estas formas de conocimiento no son infalibles, entonces tiene que haber otro tipo de conocimiento, un conocimiento enseñado por algo que sí es infalible.
Restringir el conocimiento solo a aquello que es conocible por los sentidos o por el intelecto es restringir al Creador, restringir a Dios, y dado que nada ni nadie puede restringirle, entonces es necesario que este conocimiento directamente inspirado por Él exista.
Este conocimiento es la profecía.