Por Huseyin Algul
La compasión divina y la misericordia del Profeta otorgan una especial importancia al perdón y la tolerancia. Del mismo modo que dios es el Más Misericordioso para con toda la gente, su profeta Muhammad, paz y bendiciones de Allah sobre él, es misericordioso y compasivo con todos los creyentes. La orden clara de Allah al profeta Muhammad s.a.w.s. es adoptar la compasión y el perdón. Así se indica en el Corán cuando dice:
¡Adopta la indulgencia como conducta, ordena lo reconocido y apártate de los ignorantes! (Al ‘Araf 7:199)
Por la bendición divina, el Profeta tuvo éxito en establecer la unidad entre la gente por actuar con compasión y misericordia. Si él los hubiese tratado de manera severa y ruda, ellos lo habrían abandonado y la unidad entre la gente habría colapsado. Allah dice en el Córan:
Por una misericordia de Allah, fuiste suave con ellos; si hubieras sido áspero, de corazón duro, se habrían alejado de tu alrededor… (Aal ‘Imran 3:159)
Por lo tanto, aquellos que han recibido el mensaje de Muhammad s.a.w.s. no pueden ser nunca severos, arrogantes u hostiles. Es más, Allah Todopoderoso recomienda a Su Mensajero el ser perdonador y consultar a la gente preguntándoles por sus ideas:
…Así pues, perdónalos, pide perdón por ellos y consúltales en las decisiones, y cuando te hayas decidido confíate a Allah. Es verdad que Allah ama a los que ponen su confianza en Él. (Aal ‘Imran 3:159)
Ya que el intercambiar ideas eleva el sentimiento de unidad y cooperación a la vez que reduce la tensión entre la gente. Como resultado, aparece en la sociedad un deseo de cambio, que transforma el odio en paz y serenidad.
De acuerdo con el Mensajero de Allah, la gente es igual ante Allah como los dientes de un peine son entre sí. Características como el lenguaje, los ancestros, la raza, la riqueza, o la pobreza no son signos de superioridad. Es más en el Corán se resalta no solo que estas diferencias son con motivo de que podamos reconocernos sino que no es sino el temor de Allah lo que mide la valía de las personas.
El Corán aprueba el tener una identidad y ser conocido por ella, a la vez que rechaza el abuso de la afiliación como motivo de superioridad (diferencia de género, grupos sociales o étnicos…) Ya que se evalúa el honor y valor de una persona en términos de valores universales que él o ella obtienen a través de su propia voluntad y esfuerzo, y no en términos de género o lazos étnicos que no han sido obtenidos mediante una voluntad libre.
Allah Todopoderoso espera del Mensajero de Allah s.a.w.s. en particular y de todos los musulmanes en General el ser perdonadores.
Los que se apartan de las faltas graves y las indecencias y, cuando se enfadan, perdonan. (La consulta 42:37)
Esos que dan en los momentos de desahogo y en los de estrechez, refrenan la ira y perdonan a los hombres. Allah ama a los que hacen el bien. (Aal ‘Imran 3:134)
De esta manera Allah ama las buenas actitudes tales como gastar y servir por el bien de la humanidad en todo tiempo y circunstancia, perdonando a la gente y evitando el hacer algo incorrecto cuando nos enfadamos. El Corán ilumina a toda la humanidad en este asunto:
La recompensa de una maldad es una maldad semejante a ella, pero quien pasa por alto y se reconcilia… su recompensa incumbe a Allah; es cierto que Él no ama a los injustos. (La consulta 42:40)
Por lo tanto, los individuos no deben disputar y luchar por las diferencias en sus ideas para satisfacer sus ambiciones e intereses propios. Todo lo contrario, deben competir en el mostrar buen carácter y el servir de la mejor manera, dándose soporte unos a otros no en las malas sino en las buenas acciones.
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Fragmento traducido originalmente publicado en The fountain magazine