Por: Redacción
El mes de Ramadán es el noveno mes y uno de los meses más importantes del calendario islámico.
Ramadán es el cuarto pilar del Islam, junto a la declaración de creencia, la oración, Salat; la caridad obligatoria, Zakat; el ayuno en Ramadán y la peregrinación, Hajj.
Durante el mes de Ramadán es conocido porque los musulmanes ayunan en él, y esto es quizás una de sus características más importantes.
El ayuno del mes de Ramadán se hizo obligatorio en el segundo año de la Hijrah, o hégira. La Hijrah fue el años en el que el Profeta, que la paz sea con él, emigró de la Meca a Medina.
Durante este mes se ayuna con la intención de acercarnos a Allah, de ser más humildes de incrementar nuestra adoración y autodisciplina además de ser un recuerdo de la situación de los pobres que pasan hambre en el día a día.
Además del ayuno, el Ramadán es el mes del Corán. Es el mes en el que el ángel Yibril (Gabriel) le reveló, por orden de Allah, el Corán al Profeta Muhammad, lo que dio comienzo a la profecía.
Por esta razón durante el Ramadán es bueno procurar recitar o leer el Corán al completo. Esto se hace en muchos lugares en las oraciones especiales que se realizan después del último Salat, el de Isha, en congregación y que se llaman Tarawih. También mucha gente lo hace en sus casas.
En general, los musulmanes procuran dedicar más tiempo durante este mes a la adoración, los Duas (súplicas), la recitación del Corán y haciendo buenas obras y caridad, dado que la recompensa por las buenas acciones en este mes se multiplican.
Por estas razones, el mes de Ramadán es mucho más que solo el abstenerse de la comida y la bebida.